![]() |
||||||||||
Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición "Salvador Zubirán" | ||||||||||
Departamento de Medicina del Dolor y Paliativa | ||||||||||
Inicio | Directorio de algólogos | Artículos de interés | Especialidad en Dolor y CP | Cursos | Enlaces | Contacto |
Inicio / Artículos de interés / Resumen de Journal Club
Journal Club: Dolor en el donador de órganos.
El dolor postoperatorio agudo es el resultado esperado después de una resección quirúrgica, mientras que en los últimos años se ha incrementado importantemente el número de trasplantes realizados a partir de un donador vivo relacionado, lo que ha llevado a centrar la atención en el riesgo que los sujetos sanos que se ofrecen como donadores pueden presentar durante y después de evento quirúrgico.
En un análisis realizado por Jianyong Lei et al, la morbilidad del donador se ha estimado entre el 9-75%, casi todos los donadores experimentan disfunción del órgano a corto plazo y anormalidades en el conteo celular sanguíneo. Algunas de las complicaciones relacionadas con el trasplante puede afectar la salud física, mental y psicológica de los pacientes, impactando sobre su calidad de vida. Aunque la mayoría de los donadores se recuperan totalmente de manera eventual, algunos desafortunadamente sufren de síntomas como disconfort abdominal, fatiga y hasta dolor crónico.
El dolor crónico es aquel que va más allá de la curación normal y que por lo general es experimentado después de los 2 meses del procedimiento. Esto puede afectar de forma negativa la calidad de vida en general y genera altos costos en salud. Susan Holtzman realizó un estudio donde se trato de describir la experiencia del dolor de los donadores hepáticos durante los dos primeros días después de la hepatectomía y comparar esto con la expectativa que ellos tenían desde el preoperatorio sobre el dolor postquirúrgico, antes de la cirugía los donantes esperaban tener un dolor postquirúrgico con una media de 7.9.El primer y segundo día después de la cirugía el EVA basal fue disminuyendo de manera considerable aunque posterior a los seis meses este tuvo un aumento consistente. Se observó que los donantes que puntuaron más alto en las subescalas de preocupaciones sociales y ansiedad fueron más propensos a tener dolor persistente postoperatorio. En este estudio se determino que el sexo femenino, edad temprana y características de ansiedad relacionadas al dolor, se asociaron con un riesgo significativamente mayor de desarrollar dolor postoperatorio persistente.
Hay que destacar que hay procedimientos más influyentes en el dolor que otras, la técnica quirúrgica influye en el pronóstico del control de dolor del paciente donador, en un metanálisis fue encontrado un reducido consumo de analgésicos con la técnica de laparoscopía vs técnica abierta. Hoy en día la técnica laparoscópica se considera el gold standard en la donación de donante vivo. Pues un neumoperitoneo de baja presión (7-9 mmHg) parece ser eficaz en la disminución del dolor post operatorio haciendo de éste un período de mayor comodidad. Para evaluar la viabilidad de la técnica y su eficacia para reducir el dolor post operatorio se realizó un estudio doble ciego, aleatorizado, controlado, comparando la laparoscopía con niveles de neumoperitoneo bajos (7-9mmHg) vs con la presión estándar (12-16mmHg) donde se observó que a las 72 horas el dolor intraabdominal profundo y el dolor de hombro fueron más bajos en los pacientes expuestos a neumoperitoneo de baja presión mientras que el dolor superficial de la herida y las náuseas no difirieron significativamente. El uso de opioide a las 72 horas fue ligeramente inferior en el grupo experimental. No hubo diferencia entre los grupos en cuanto a la estancia hospitalaria y/o la TFG.
También otras técnicas como la nefrectomía del donador se realizan hoy en día mediante técnica laparoscópica reduciendo el dolor postoperatorio y el uso de opioides. Dentro de esta técnica existe la nefrectomía laparoscópica retroperitoneal disminuyendo el dolor en comparación a la nefrectomía laparoscópica transperitoneal que es más dolorosa. Sin embargo factores que afectan al donador incrementan su percepción al dolor.
Según el autor J. Wang y colaboradores realizaron un estudio clínico prospectivo en trasplante renal donde los resultados indican que hay una diferencia significativa en EVA entre la 2 y 4 hora y dentro de 4 y 8 horas entre los donadores en relación con los pacientes nefrectomizados, se dice que los motivos de mayor dolor en donadores probablemente es la eliminación de morfina a través de la excreción renal. El tipo de Procedimiento tiene beneficio entre uno u otro individuo por lo que la percepción es diferente. Además al someterse a este procedimiento el donador queda expuesto a sufrir mayor morbi-mortalidad.
También hay que resaltar que las técnicas neuroaxiales son de gran ayuda para el manejo de dolor postoperatorio en el donador, en el centro médico Samsung en Korea del Sur se realizo un estudio donde se comparaban la efectividad analgésica de infusión con morfina intratecal mas infusión de fentanil intravenosa en pacientes donantes hepáticos, durante la anestesia no hubo diferencias en el manejo anestésico ni en el procedimiento quirúrgico, al final se encontró que la analgesia intratecal mas intravenosa era superior en calidad de analgesia en las primeras 12 horas, después de las cuales no había diferencia entre ambas técnicas ni en calidad de analgesia.
Es relevante mencionar que existen pocos estudios que pre clínicos que discutan el tema del dolor en el donante de órganos es muy importante en manejo preanestésico de dolor pues existen condicionantes que pueden predisponer a dolor crónico postoperatorio.
Bibliografía
|
Resumen a cargo de Heidy Rojas (Algología, INCMNSZ).
- Departamento de Medicina del Dolor y Paliativa | ¿Preguntas o comentarios? |
|